
CAMILA R. SALAZAR
Desaprender el espacio
Desaprender el espacio interroga la casa como territorio de trabajo invisible. Sobre objetos cotidianos —un cucharón de madera, el bolsillo de una camisa, un plato— fijo con cianotipia los rostros de mi madre y abuela, mujeres cuyos días se tejieron entre lavar, cocinar y cuidar sin remuneración ni reconocimiento.
La técnica fotográfica en tono azul de Prusia convierte estos utensilios en relicarios: la imagen de mi madre se desvanece en el plato como el esfuerzo que la sociedad olvida; su retrato en el cucharón transforma el instrumento para alimentar en monumento al cuidado. Cada pieza, con sus medidas variables, replica la elasticidad demandada a sus cuerpos —siempre ajustándose, siempre disponibles—.
El bolsillo guarda un doble silencio: es el lugar donde ellas escondieron sueños postergados y ahora acoge sus rostros como huellas imborrables. Desaprender el espacio no solo expone la economía afectiva del hogar, sino que reclama —en el lenguaje químico de la cianotipia— que esas manos que sostuvieron la vida merecen ser registradas con la misma permanencia del azul de Prusia
Cianotipia sobre madera, papel, tela y loza | Medidas variables | 2022





